El partido más caótico del gobierno actual

El partido más caótico del gobierno actual

El partido político de Geert Wilders, el PVV, ha crecido explosivamente durante los últimos años. Desde la fundación del partido las prioridades han sido las mismas: reducir la criminalidad y la violencia con mano dura, y expulsar a delincuentes con dos pasaportes. Sin embargo, en el grupo parlamentario de Geert Wilders hay algunas personas que tienen historias criminales. Por ejemplo, Eric Lucassen que ha recibido una condena condicional a causa de cometer abusos deshonestos. También James Sharpe da que hablar. Sin embargo, Geert Wilders quiere mantener su grupo parlamentario con estas personas. Parece que mide con doble rasero. Los inmigrantes que han cometido un delito tienen que salir en su opinión, mientras que los autóctonos que han cometido un delito pueden ser parte de su grupo parlamentario.

Evidentemente, la estabilidad del gobierno es muy importante para Wilders, ya que es un golpe de suerte que puede participar. Lucassen tiene su propio escaño y si Wilders priva de su calidad de miembro a Lucassen, Lucassen puede mantener su escaño. En este caso, el gobierno no tendría más una mayoría y caería el gobierno por problemas del PVV. Por eso es comprensible que Wilders tenga que tolerar a Lucassen en el grupo parlamentario.

Wilders mismo ha dicho que no tenía suficiente tiempo para investigar los antecedentes de los candidatos detalladamente, porque el partido ha crecido muy rápido.

Sin embargo, todo lo que ha pasado ha afectado la credibilidad de Wilders. Tendría que condenar las historias de Lucassen y Sharpe más duro. Tendría que haber preguntar más al contratar parlamentarios.  Su manera de trabajar era descuidada y como consecuencia, ahora tenemos parlamentarios desagradables con historias criminales. Una persona que mide con doble rasero y que contrata delincuentes no debería ser líder de un partido político.

Lo positivo es que la situación no puede continuar así para siempre. Si el PVV sigue así con tantos problemas e incidentes, el gobierno caerá y tendremos un nuevo gobierno. Una Segunda Cámara del Parlamento sin personas condenadas sería mejor para el país.