FC Barcelona - Real Madrid, más que un partido de fútbol

‘FC Barcelona – Real Madrid, más que un partido de fútbol’

 

Algunos dicen que fútbol es solamente un juego, once contra once, noventa minutos y al
final hay un ganador o se concluye en un empate. No estoy de acuerdo. El fútbol aquí en Holanda está un poco triste a veces, en un día lluvioso los jugadores no quieren esforzarse. Sólo hay tres puntos en el juego, nada más. El fútbol español es una historia completamente diferente. Se trata de fidelidad, honor, orgullo y amor. Como ejemplo extremo funciona FC Barcelona – Real Madrid, ‘el partido del universo.’

 

¿Por qué hay tanta rivalidad entre estas ciudades españolas? Para responder a esta pregunta

hay que volver en el tiempo. Comenzó con la elección de la capital; Barcelona era muy

poderosa en este tiempo, era un verdadero comercio. Y entonces, Madrid fue la capital. Los

catalanes todavía son asombrados. Después, cuando ‘el caudillo’ Franco llegó al poder, la

lengua de los catalanes fue prohibida. Solamente en el estadio de Barça, el Camp Nou,
la gente pudo hablar catalán. Por ello, los catalanes tienen odio a los madrileños,

un sentimiento que va a ser aun más grande. Los centralistas de Madrid están en contra

de la independencia de Cataluña, un proyecto con lo que se pueden mejorar su vida, según

ellos. Por eso, y por muchas razones más, el partido de FC Barcelona – Real Madrid es una

batalla, una guerra pequeña que tiene lugar en la hierba santa del Camp Nou.
El coloseo de edad fue nada comparado con este ambiente hostil. El domingo que viene, a

las siete, hay una nueva edición de este encuentro. FC Barcelona es favorito porque tiene

un partido casero. Lionel Messi, el mejor futbolista del mundo, no puede jugar, pero espero

que eso no vaya a influye el partido, hay demasiados buenos futbolistas en la selección

 ‘Blaugrana’.

Aunque en el ‘cant de Barça’ se dice ‘si del sud o del nord ara estem d’acord’ no

se trata sobre la diferencia entre el oeste y el este.

 

‘Som la gent blaugrana tant se val d’on venim’.